Junto con todas las maravillosas posibilidades que ofrecen las redes sociales, se hicieron frecuentes algunas malas estrategias y decisiones por parte de quienes las utilizan.

No se trata simplemente de pequeños errores. A veces son equivocaciones lo suficientemente graves como para echar a perder todos nuestros esfuerzos, e incluso obligarnos a cancelar el proyecto en el que estemos trabajando. Son errores considerables que puede cometer cualquier compañía, sin importar su tamaño.

Hoy haremos un llamado de atención sobre estos errores para ayudarte a evitarlos.

1. La mentalidad “primero disparo, después apunto”
Es increíble que aún hoy, muchas compañías y organizaciones se instalen en las redes sociales sin haber definido antes una razón clara para hacerlo. ¿A quién quieren dirigirse? ¿Qué resultados esperan obtener? Ésas y otras preguntas elementales, que deberían ser identificadas y respondidas en primer lugar, suelen dejarse de lado.
Hay páginas de Facebook que obtienen rápidamente miles de “me gusta” sólo gracias a la popularidad previa de la marca. Será cuestión de tiempo hasta que los usuarios se den cuenta de que no se planteó adecuadamente una estrategia general. Las actualizaciones son esporádicas, la información que se brinda no tiene valor y las preguntas del público no se responden.
Una de las mejores maneras de evaluar tu presencia en las redes sociales es la siguiente. Piensa en tu página como una pequeña ciudad. Si tienes un pueblo de 10000 o 100000 ciudadanos, ¿crees que podrías gobernarlo de manera efectiva sin cierta capacidad de liderazgo?
Si buscas tener una presencia efectiva en redes sociales, piensa en eso en primer lugar y plantea una buena estrategia de gobierno.

2. Usar la estrategia “si tú lo construyes, ellos vendrán solos”
Hay páginas de Facebook y cuentas de Twitter que se vuelven populares repentinamente sin mucha promoción. Son casos especiales: quizás se trata de una marca grande y reconocida o de una celebridad que ya tenía muchos seguidores en el mundo offline.
Es más común el caso opuesto: una campaña online que se lanza desde cero, sin una base de fanáticos previa. Al igual que lo que sucedía en otras épocas con foros y blogs, muchas compañías arman páginas de Facebook y cuentas de Twitter simplemente porque todos hacen eso. Y esperan que los fans aparezcan por sí solos.
Hay docenas de artículos, libros y blogs que pueden ayudarte a promover tu presencia en redes sociales. El uso de la promoción tanto online como offline es vital para impulsar nuestro negocio y poder desarrollar un blog, una cuenta de Twitter o una página de Facebook que cumplan los objetivos buscados.

3. “Nuestra agencia de relaciones públicas se encargará de eso”
Las agencias pueden ser de mucha ayuda para promover tu presencia en redes sociales, pero eso es apenas el primer paso. ¿Qué hay del largo plazo? ¿Por cuánto tiempo más esperas que la agencia se encargue de promoverte? ¿Un año? ¿Tres?
En la mayoría de los casos, el costo de trabajar con una agencia puede ser insostenible en el largo plazo. Por eso, debes planificar cómo manejarás tu campaña en redes sociales de aquí a los próximos años.
Además, los usuarios de redes sociales buscan autenticidad. Quieren obtener actualizaciones directamente de aquellos que manejan la compañía: los desarrolladores, el CEO, la secretaria, el empleado nuevo. No es divertido recibir noticias por parte de personas que no están directamente involucradas con el día a día de la compañía.
También piensa en cómo manejarás la atención al cliente a través del correo electrónico. Si trabajas en crear un vínculo genuino con tus clientes, sólo es cuestión de tiempo para que el correo electrónico se convierta en un canal de comunicación fundamental para la ayuda al consumidor. ¿Quién se encargará de evaluar la situación de la compañía en términos sociales? ¿Qué herramientas puedes usar para volver tu campaña más fructífera y eficiente?
El problema es que tu agencia puede ser genial en términos de marketing y promoción, pero no tiene una vinculación tan cercana con tu producto como para ofrecer una atención al cliente realmente efectiva. Estudia el modelo que utilizas para ofrecer ayuda al consumidor a través del teléfono y el correo electrónico y trata de aplicar los mismos criterios para ayudar a los consumidores a través de las redes sociales. Puede ser una manera más efectiva y posiblemente más asequible de ofrecer soporte en comparación con la que puede ofrecer una agencia de marketing, publicidad o relaciones públicas.

4. Rechazar los medios tradicionales (“Las redes sociales son todo lo que necesitamos”)
Al igual que los avisos en medios impresos, las redes sociales no bastan por sí solas para sostener una buena campaña. Debe apuntarse a estrategias más amplias tanto para marketing como para atención al consumidor. En los últimos dos años, demasiados negocios han ido relegando los enfoques tradicionales en la construcción de sus marcas en beneficio de la acción en redes sociales.
No caben dudas de que las redes sociales tienen una importancia vital y han llegado para quedarse, pero deben considerarse como un mero componente de una estrategia general más grande. Si toda tu estrategia se basa en redes sociales, probablemente debas hacer una pausa y reevaluar lo que estás haciendo.

5. Cualquiera puede ser un estratega de las redes sociales
La buena noticia es que, en la actualidad, muchas compañías son conscientes de que construir presencia en las redes sociales no es tan fácil como parece. Esto significa que cada vez más gente decide tomarse el tema con seriedad y no limitarse a preguntarle a algún sobrinito o algún simple aficionado a Facebook cómo manejar la campaña online de su compañía.
La mala noticia es que puede ser difícil saber a quién pedirle ayuda. De repente, todos parecen haberse vuelto gurúes en redes sociales.
Las redes sociales han evolucionado tan rápidamente que casi nadie debería autodefinirse como un experto o un gurú en la materia. Incluso el más veterano “gurú de Facebook” ha de tener, como máximo, siete años de experiencia, ¡y eso únicamente si fue uno de sus desarrolladores!
El problema es que la mayoría de los autoproclamados expertos tiene apenas dos o tres años de experiencia en un área que cambia y evoluciona constantemente. Toma con cautela las declaraciones de cualquiera que se autodenomine “experto”. Si puedes evitarlos, mejor.

Ver artículo: Five Social Media Mistakes That Suck

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